El viaje de la educación: Un camino de sabiduría y transformación

Imagina que te subes a una máquina del tiempo que te transporta por los siglos de la historia. Cada parada es una puerta a una era distinta, donde la educación se ha vestido de mil colores, ha creado sus propias leyendas y mitos, y ha formado lo que hoy en día conocemos como saber.

Primera Parada: La Antigua Grecia

En el corazón de Atenas, donde los diálogos de Sócrates, Platón y Aristóteles se convertían en una historia viva. Sócrates enseñaba a través del diálogo. Platón llevó este modelo a su Academia, y Aristóteles lo perfeccionó en el Liceo, donde se combinaban la filosofía, las matemáticas y la astronomía. La sabiduría se transmitía a través de paseos por jardines y gimnasios. Allí, cada conversación era una forma a de encender el pensamiento de cada persona.

La esencia de la educación griega radica en la curiosidad y la búsqueda constante de respuestas ¿No es acaso nuestro deseo actual aprender a cuestionar el mundo que nos rodea?

Cuando pienso en todo esto, se me vienen a la cabeza mis mejores amigas, Leire y Andrea, también mis compañeras de biblioteca. Son las personas que más me han acompañado en los últimos años. Y cuando pienso en la forma de enseñar de la antigua Grecia, se mueve a la cabes nuestras conversaciones en los descansos de la biblioteca en las que nos contamos lo que hemos estado estudiando, las cosas que nos han parecido interesantes de nuestro temario, los proyectos o tareas que tenemos que hacer. De esta manera, aprendemos cosas las uñas de las otras.

Segunda parada: Los Monasterios Medievales

En los monasterios medievales, la educación no era un derecho, sino un privilegio reservado a quienes dedicaban su vida a la religión.

Los monjes copiaban textos antiguos, asegurando que el conocimiento no se perdiera en tiempos turbulentos. Pero más allá de los muros del monasterio, algo nuevo estaba naciendo: las universidades. En ciudades como Bolonia, Oxford y Salamanca, los estudiantes debatían sobre gramática, retórica y astronomía. Así nacieron  las artes liberales, divididas en el Trivium y el Quadrivium.

En la actualidad, el conocimiento es accesible con solo un clic. Pero, ¿valoramos realmente la educación como un privilegio o la damos por sentada?

Cuando pienso en las clases de esos monasterios, me acuerdo de cuando ayudaba a mi madre con sus clases cuando era más pequeña, yo me sentía la persona más inteligente del mundo. Me encantaba ver a los niños interesados con lo que yo estaba contando. Yo me lo tomaba muy en serio, por tanto me imaginaba que estaba en una de esas clorases de los monasterios tan serias y estructuradas.

Tercera parada: La escuela de la Revolución Industrial 

En esta época, la educación dejó de ser un lujo y se convirtió en una necesidad.

Con la llegada de la Revolución Industrial, la sociedad requería trabajadores alfabetizados y disciplinados. Surgieron escuelas públicas con horarios estrictos, donde la memorización y la obediencia eran fundamentales. Además, la consolidación del Estado-nación convirtió la educación en una herramienta de formación cívica y moral. Un ejemplo, de estas escuelas es la Escuela Victoriana con la que se consiguió extender la escuela pública a otras clases sociales. 

El modelo educativo basado en horarios rígidos y repetición sigue vigente. ¿Es este el mejor método para formar ciudadanos críticos y creativos en el siglo XXI

Cuando la educación cambió de esta forma con la revolución industrial, pienso en el cambio que supuso pasar a bachillerato, cuando todo pasó de “diversión” a tener que estudiar todos los días tanto. Un estudio rígido y formal. Pero, en el que tuve siempre el apoyo de mis amigas del cole. Cuando podíamos salir al patio reírnos un rato, dejar de sentir la presión del curso en el que estábamos simplemente para estar juntas.

Cuarta parada: Entre la Tradición y la Reforma

En España, el siglo XX trajo consigo transformaciones radicales en la educación. Durante la Segunda República (1931-1936), se promovió una enseñanza laica y democrática, pero tras la Guerra Civil, el franquismo reinstauró un modelo religioso y nacionalista, donde la enseñanza se dividía por sexos y se centraba en la moral católica.

Con la llegada de la democracia, surgieron reformas como la LOGSE (1990), que apostó por una educación más inclusiva y flexible. Le siguieron la LOCE (2002), LOMCE (2013) y la LOMLOE (2020), cada una con enfoques distintos sobre la calidad educativa y la autonomía de los centros.

A lo largo de la historia, la educación en España ha estado influenciada por los cambios políticos. ¿Cómo podemos garantizar un sistema educativo estable y adaptado a las necesidades reales de los estudiantes?

 Todas estas leyes educativas que transformaron tanto la educación y la convirtieron en algo adaptado a cada uno de nosotros, me entra la nostalgia de cuando era más pequeña, cuando iba al cole a disfrutar de verdad. 

Quinta parada: La Revolución Digital y la Educación Global

Las aulas han cambiado. El pizarrón ha sido reemplazado por pantallas, los libros por plataformas digitales y las clases pueden darse desde cualquier parte del mundo.

Hoy vivimos en la era de la educación digital, donde el conocimiento ya no depende exclusivamente del profesor o de los libros de texto. Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) han revolucionado la enseñanza, permitiendo que millones de personas accedan a cursos en línea, videos educativos y foros de debate globales.

El acceso al conocimiento nunca ha sido tan fácil, pero también enfrentamos nuevos desafíos: la sobrecarga de información, la falta de pensamiento crítico y la necesidad de adaptar la enseñanza a un mundo digital. ¿Estamos preparados para aprovechar al máximo esta nueva era del aprendizaje?

La revolución tecnológica afectó a todo el mundo de forma mundial, esto me recuerda al COVID, a cuando teníamos que unirnos a las videollamadas de las clases, y solo gracias a estas los profesores pudieron continuar con sus clases para que no tuviéramos que repetir el curso. De esta manera, pudimos seguir aprendiendo aún estando en una pandemia mundial.

Desde los jardines de la Academia de Platón hasta las aulas virtuales del siglo XXI, la educación ha sido un reflejo de la sociedad y sus valores. Cada época ha aportado algo distinto: el pensamiento crítico de la Grecia clásica, la rigurosidad de las universidades medievales, la accesibilidad de la escuela industrial y la revolución digital del presente.

Sin embargo, el gran desafío sigue siendo el mismo: formar personas capaces de cuestionar, innovar y transformar el mundo.

Y tú, ¿cómo imaginas la educación del futuro?